21/12/10

Música libre

Dentro de las muy particulares (y tal vez hasta discutibles) preferencias musicales que nos identifican, este vagabundo no se declara adepto a los discos "tributo", ya que es de la opinión de que de que en la mayoría de las ocasiones, dichas producciones, no son más que dos cosas:
  1. Producciones destinadas única y exclusivamente a vender, sin importar realmente la calidad del "homenaje"; y
  2. Producciones hechas por artistas mediocres, quienes tratan de colgarse del renombre y fama de otros artistas consagrados, a ver si así logran llamar un poco la atención (léanse Cristian Castro y Nicho Hinojosa, por mencionar algunos).

Sin embargo, a finales de septiembre, llegó a nuestros oídos una noticia que nos causó gran expectación: el grupo chileno
Los bunkers presentarían, a finales de noviembre, Música libre, un disco homenaje a uno de los tres santos patronos de este nómada hogar: San Silvio Trovador.

Movidos, tanto por la calidad musical de esta banda (de la que si bien no somos un grandes seguidores, nos gusta mucho), como por un poco de morbo, nos hicimos del material en cuanto lo descubrimos en el mercado. La sorpresa fue doblemente grata; por una parte, el reencuentro con una serie de canciones que entre tantas que tiene el gran Silvio Rodríguez hacía un buen tiempo no escuchábamos, como por la forma en la que le dan vuelta y, sin perder la esencia de cada una de ellas, les dan una nueva vida en reinterpretaciones que echan mano de diversos géneros que se fusionan y coexisten armónicamente entre sí.

Este álbum (el sexto oficial de la carrera de Los bunkers), es el primero grabado en México, e inició sus grabación el 1 de abril de 2010, contando con producción de Emmanuel "Meme" del Real (
Café Tacuvba) y con una participación especial del cantautor chileno Manuel García (Al final de este viaje en la vida y La era está pariendo un corazón). Contiene doce temas, y aquí hay algo no sólo rescatable sino muy importante: no se trata de los típicos temas de Silvio que repiten sistemáticamente todos esos "silviófilos" de café, que se dicen admiradores y profundos expertos del trovador; pero no se saben más allá de cinco o seis temas. Este álbum contiene en su mayoría, piezas que nadie o muy pocos repiten, como es el caso de Leyenda, Ángel para un final y Que ya viví, que ya te vas.

Seguramente, al escucharlo, muchos puristas se pondrán de cabeza y acusarán a
Los bunkers de "ultrajar" las canciones de Silvio; pero desde nuestra perspectiva, se trata de todo lo contrario: en la fusión de sonidos, consiguen una verdadera y excelente placa "homenaje"; una producción poderosa y que le mueve a uno las entrañas cuando se van reconociendo las piezas y que, por otro lado, acerca al público joven a la obra de un artista magistral que por cuestiones de generacionales y de la moda, aún no han tenido la oportunidad de descubrir,; pero ahora con sonidos que a veces nos recuerdan el estilo de Revolver (los Beatles, 1966), las bandas sonoras de las películas de Tarantino, e incluso ritmos como el funk y otros más de corte folclórico; pero sin perder nunca esa identidad, esa fuerza y originalidad que ha distinguido a Los bunkers desde sus inicios. Ahora bien, para aquellos críticos furibundos, los miembros de la banda, según tenemos entendido, y precisamente buscando el mejor producto, los integrantes de la banda hicieron llegar al propio Silvio Rodríguez la s pre-mezclas, pidiendo no sólo sus comentarios sino también su aprobación, recibiendo por respuesta un correo electrónico en el aprendiz de brujo decía "le había encantado"*.

Pero más que hablar bien del disco, lo mejor es escucharlo y dejarse llevar por combinaciones y fusiones tan insólitas como que sólo al descubrirlas se creen posibles. Sin duda y a nuestro parecer, uno de los mejores trabajos "tributo" que se han realizado en mucho tiempo, y una producción que vale la pena escuchar.




* http://lasegunda.com/ediciononline/espectaculos/detalle/index.asp?idnoticia=605432

1 comentario:

Rembrandt dijo...

Es distinto, diferente sin dudas, pero como dijera Silvio, me encantó.

Mi querido Raúl, nunca es tarde para recibir y dar afecto cuándo de los amigos se trata. Me ganaste de mano porque te iba a escribir hoy justamente.
Te dejo todo mi cariño y los mayores deseos de que estos días estén siendo muy bellos junto a tus seres queridos y por supuesto el 2011 sea uno de los mejores de tu vida.

Besos de tu amiga sureña.
REM (la otra)