5/9/09

Día tras día

Una flor dura un verano,
un verano son tres meses,
doce meses tiene un año
puede un año ser tan breve
como es breve el diccionario
para definir quién eres...

Así arranca la sexta producción musical de Andrés Cepeda. Día tras día se llama el álbum y llegó a mis manos esta semana; lo he escuchado obsesivamente en los últimos días y, fuera de cualquier objetividad, cada vez me gusta más. Pero ¿quién es Andrés Cepeda?

Andrés es colombiano y actualmente tiene 36 años, comenzó a los cinco años sus estudios musicales y su primera composición la hizo con tan sólo doce años de edad; fue mal estudiante y muy indisciplinado, por lo que en su relación escolar hay una variada lista de instituciones educativas hasta llegar el colegio Emilio Valenzuela, donde conoció a César López, Fredy Camelo, Gustavo Gordillo y Juan Gabriel Turbay, con quienes formó el grupo de pop Poligamia, ganando allá a principios de la década del noventa el primer puesto en un concurso de bandas locales. Con el grupo grabó cuatro discos: Canción de Una (1993), Vueltas y vueltas (1995), Promotal 500 m.g (1996) y Buenas Gracias - Muchas Noches (1998), el concierto de despedida del grupo. Tras la disolución del grupo, Andrés toma camino a Miami, donde pasa dos años estudiando producción musical, participando en producciones de sus compatriotas Carolina Sabino y Marbel.

Posteriormente decide regresar a los escenarios y graba Se morir (1999), donde ya se marca perfectamente su estilo y su versatilidad, pues rompiendo con la imagen rockera a la que se le asociaba desde sus tiempos en Poligamia, comienza a experimentar con temas más bohemios y románticos, combinando balada, jazz y bolero, teniendo un gran éxito entre el público colombiano que lo hizo acreedor a un doble disco de platino. dos años más tarde presenta El carpintero, donde mezcla pop, son, boleros, música cubana y antillana y algo de rock, fascinando con temas como Tengo ganas, Palabras y Hasta que venga la mañana, al tiempo que participa con los temas Piel canela y No voy a dejarte ir, en la banda sonora de la telenovela El inútil. Las ventas suben y se consolida como artista. Decide dar un paso más en y el 7 de marzo de 2002 presenta en el teatro Colón de Bogotá el concierto Siempre queda una canción, del que resultan un disco y un Dvd y en el que hace una compilación de sus canciones recientes como de algunas de su etapa en Poligamia, mereciendo nuevos reconocimientos y premios. al año siguiente regresa con Canción rota, continuando con el éxito y destacando canciones como Lo que dejaste atrás, Mientras más pasaba el tiempo, y Emborráchame de amor, con las que termina de afirmar su versatilidad sonora.

Pero sin duda, lo que lo lanza a las ligas mayores, al mercado internacional es Para amarte mejor (2005), a nuestro juicio su mejor disco, que le abren la puerta de Europa, presentándose en ciudades coo Barcelona, Madrid y Roma, siendo nominado en 2007 al grammy latino en la categoría de Mejor Álbum Pop Masculino.

Y hoy, después de cuatro años de ausencia regresa con Día tras día, un disco variado y novedoso, donde encontramos a un Andrés Cepeda intimista, de interpretaciones entrañables y una voz que lo distingue por su capacidad para adaptarse a géneros como el blues, el bolero tropical o la balada pop, llenando nuestros oídos con su voz siempre amable y la sencillez con la que nos hace sentir todas y cada una de sus composiciones.

Son dieciséis los temas que integran esta producción, en la que participan su buenos amigos Fredy Camelo y Juan Gabriel Turbay y comparte micrófonos con el argentino Nito Mestre y la cubana Teimari. En ellos, como ya es costumbre en Cepeda, se mezclan y combinan diferentes ritmos y ambientes sonoros que abordan con grandes resultados el bolero, el poop-rock, latin jazz, ritmos caribeños, andinos y brasileños.

Se trata de un pop muy latinoamericano, de gran calidad y que va mucho, mucho más allá de formulitas de deshecho estilo RBD o Paulina Rubio, o con aires de suficiencia como Arjona, y que establece un puente entre generaciones, dado el buen gusto con el que están hechos los arreglos fusionando estilos, digamos, antiguos con composiciones totalmente actuales. Se trata de un disco que muestra de principio a fin cómo Andrés se lo goza, un pedacito de su sentimiento, de él mismo, refrendando una vez más con el compromiso del artista, no de vender por millones, sino de tratar de ofrecer calidad en su trabajo, siempre con la sencillez que lo caracteriza. Aunque el conjunto es excelente, destacamos Día tras día (el sencillo con el que lanzó el disco), Faltarán, Me sacaste de la casa y Vitral (track oculto por ahí del minuto 3:30 del tema Necesito); nos encontramos frente a un disco para escuchar con calma, reparando en cada letra, en cada inflexión de la voz, cada acorde, para dejarnos llevar por la fuerza evocativa que imprime en cada interpretación. Después de eso no es difícil pensar por qué está nominado para los premios Shock 2009 como mejor artista nacional, mejor artista pop, y mejor álbum del año.

Andrés Cepeda es uno de esos tipos descomplicados y sencillos, que simplemente llega canta y fascina, así ha sido los poco más de siete años que tenemos de conocer y disfrutar su trabajo (allá cuando emprendimos la primera expedición a Colombia), de sentir como nuestras cada una de sus canciones, tratando de hacer que la gente lo conozca en México, cuyo trabajo es inconseguible en México (sólo una vez hemos visto un disco de él en tienda, bajo el sello de Orfeón, una disquera antigua y en decadencia, perdido entre las ofertas), y muy difícilmente es programado en las estaciones radiales).

En fin, es mucho lo que podemos decir de este artista y de su trabajo; pero con toda seguridad muchas plumas más autorizadas ya lo hicieron o están por hacerlo; baste entonces este post para hacer una recomendación a nivel personal de este nuevo disco Día tras día, y en general de todo el regalo auditivo que nos ofrece Andrés Cepeda y sus canciones.

Aquí el nuevo sencillo, en el que participan como grupo de apoyo, sus ex compañeros de Poligamia:


Esto es un poco anterior:


Esto es de lo clásico, en su concierto en el Teatro Colón:



Y una más, en vivo, en su gira 2006; canciones excelentes, aunque con no muy buen sonido: