31/10/09

Primer año

Y bien, estamos cumpliendo un año de que iniciamos estos pasos en la red, y parece mentira cuántas cosas han pasado a lo largo de este trayecto; pero sin duda, lo más importante ha sido la oportunidad de poder escribir con total y absoluta libertad, dejar fluir las palabras sin restricción alguna, haciendo que como dice una canción de Marina Rossell, las palabras curen las frustraciones y la incomprensión que a veces inunda el entorno.

Pero hemos cumplido el compromiso y el objetivo planteado hace trescientos sesenta y cinco días, cuando después de una grave crisis imaginativa, decidimos retomar el camino y asumir la disciplina de dejar testimonio de estos pasos semana a semana, sin imaginar, y en eso seremos honestos, que en algún momento alguien se tomaría la molestia de detener su andar para leer estas líneas en las que ha habido, si no de todo como en botica, sí muchas de las cosas que interesan y mueven a este vagabundo, y que felizmente, en varias ocasiones han encontrado eco en otras personas, permitiéndonos además conocer gente nueva e intersante, así como reencontrarnos con viejos amigos y personas importantes para nosotros y con quienes por una u otra circunstancia no habíamos tenido la posibilidad de cruzar nuevamente los caminos.

El proceso de consignar cada semana ideas e historias ha sido edificante, divertido; pero también complicado, ya una vez que uno se encarrila nuevamente como imaginauta, resulta difícil parar y seleccionar lo que se publicará o no en este espacio de entre el cúmulo de páginas que se han gestado a lo largo de este año. Ignoramos en este momento si las huellas que se han impreso en estas tierras virtuales son o no las mejores, las más interesantes; pero sí podemos asegurar que en cada una de estas intervenciones va la entraña entera del vagabundo.

Por ello quisimos dedicar esta ocasión para agradecer a los amigos viejos, a los nuevos y aquellos caminantes anónimos, a los que continuamente dejan comentarios en el blog y a los que nos comentan por teléfono o personalmente; pero también a los que no dicen nada y los que incluso hasta por error han se han encontrado con este espacio, con estos pasos. Si alguna de estas líneas han podido mover algo dentro de su ser, entonces, la misión estará cumplida.

Ya vendrán nuevas historias, nuevos versos, nuevos sonidos y nuevas ideas a instalarse en este blog, empezaremos una y otra vez, muchos llegarán y otros tantos se irán, andaremos unos pasos y desandaremos otros; pero la historia de este año y de todos lo que directa e indirectamente han intervenido en ella, quedará definitivamente inscrita en la Historia de este rotundo vagabundo.

De nuevo gracias a todos, y sigamos adelante.